El castillo de Chenonceau: La joven reina y la suegra malvada

Castillo de Chenonceau

Las protagonistas

Catalina de Medicis
-LA SUEGRA-

Maria Estuardo
-LA VICTIMA-

"Era una fría mañana de febrero y Catalina se disponía a comenzar su jornada de trabajo en su Gabinete Verde. Un gabinete privado para si misma, desde donde planearía no solo el destino de sus hijos y nueras, sino el de la Francia misma. 

Enrique II, su marido, había fallecido durante un torneo contra Gabriel, Conde de Montgomery, celebrado con motivo de la boda de su hija Isabel con Felipe II de España.  Catalina ya viuda, gobernaría con mano de hierro al pais galo, desde el hermoso castillo de Chenonceau.

Maria Estuardo, una de sus nueras, paseaba por los jardines del castillo en compania de su frágil esposo, hijo mayor de Catalina, Francisco II de Francia.  La historia tendría reservado para esta nuera un fugaz lugar de privilegio en Chenonceau hasta que su suegra, ante la muerte de su hijo, la enviara de regreso a Escocia, para que luego terminara en manos de su prima Elizabeth I de Inglaterra y le cortara la cabeza.  (ver entrada: El Stirling de Maria, William y Robert)

Ante el frío y la débil salud de Francisco para afrontar el clima, la pareja decidió entrar haciendo que la explanada empeorara la condición respiratoria del joven príncipe   Al llegar a la puerta, Catalina se encontraba de casualidad al paso de la joven pareja, pero ésta solo dirigió sus ojos a Maria, solo en Maria.  

Las dos mujeres se quedaron fijas en la mirada de la otra. Catalina reprochaba sin palabras a su nuera por exponer a su hijo a enfermarse aún mas. La necesidad de un nieto heredero se hacia cada vez mas apremiante.  Internamente su madre no guardaba muchas esperanzas; el joven Francisco era de constitución infantil, deforme y subdesarrollado, con serios problemas de salud. Sería un milagro si pudieran concebir al heredero tan deseado para la implacable suegra.

Maria se despidió de su esposo sumisa, pero sin antes dar una última mirada desafiante a Catalina, su enemiga intima. 

Podía verse a las dos reinas juntas, pero Maria, a quien la torpeza llevaría a ser decapitada no muy lejos de allí,  tenía una actitud despectiva con respecto al origen de su suegra, inferior en rango al suyo.  Una tarde, en uno de los salones Catalina escuchó a su nuera murmurar: "Mi suegra no es mas que la hija de un comerciante florentino".

Al poco tiempo Francisco murió y así quedaron las dos mujeres enfrentadas: La madre y la viuda. Maria, sin mas que hacer, estorbaba visiblemente en la corte, por lo que volvería a su país natal para lo que siempre estuvo destinada: ser reina de los escoceses. 

La joven reina no supo ser fiel a su legado, y tampoco tuvo una larga vida. Pero su hijo, quien sería el Rey de Inglaterra, la reivindicaría, al igual que la historia.

Chenonceau volvía a tener a Catalina como regente. No era la primera vez que se deshacía de sus contrincantes.  Era una Medicis, y ella solo debía esperar, como supo esperar hasta que muriera su marido para quitarle el castillo a Diana de Poitiers, quien había sido amante del desafortunado rey. 

El camino estaba allanado. Ahora solo debía seguir gobernando. Fue esposa y madre de reyes, para ella, también la historia tendría un lugar importante." 


Claro, podría haber sucedido. Esta breve historia totalmente novelada por mi, es lo que me inspiro este Castillo. Salvo detalles el resto de la historia realmente sucedió.

Personajes tan famosos y con personalidades y enemistades tan documentadas, como autor de mi blog dejé llevar mi imaginación y di vida a Catalina y Maria, desde un lugar mas cotidiano, como lo puede ser la relación de una suegra con su nuera, con la suma de intereses y poderes que encerraban cada una en su propia persona.

Las dueñas del castillo fueron casi exclusivamente mujeres viudas, nobles y aristócratas que tuvieron una ambición común: ser la dueña y señora de este chateau del Valle del Loira.



Damos una vuelta por el castillo?.

Típica entrada de muchos castillos, un camino bordeado de arboles hasta la entrada principal

Entrada principal. Foto antes de entrar a hacer el recorrido

Entrada principal, foto sacada desde adentro hacia afuera

Al enviudar Catalina de Enrique II embelleció aun mas el castillo y continuo mejorando la arquitectura. Ella fue la responsable de la galería de doble piso para organizar suntuosas fiestas.

Detras nuestro pueden ver el puente que mando  cubrir Catalina en 1576 "La gran galería"

La gran galería por dentro

Esta galería se inauguro en 1577 durante las fiestas organizadas por Catalina de Medicis en honor de su hijo el rey Enrique III.

El Gabinete Verde. Desde donde Catalina gobernaría Francia

Uno de los salones, con el retrato de Catalina

Aposento de Catalina de Medicis

Foto sacada desde una de las torres con vista al jardín lateral

Diana de Poitiers

Este castillo había sido un regalo del rey Enrique II a su amante, Diana de Poitiers (1499-1566). Cuando este murió, Catalina no solo la hecho a patadas sino que embelleció aun mas los jardines y se hizo su propio laberinto.

En un claro del parque, el laberinto italiano de Catalina.

Mas fotos del castillo 

Este castillo fue administrado y protegido por mujeres, todas fuera de lo común  y de las cuales la mayoría marcaron la historia. Chenonceau es conocido también como "El castillo de las Damas" en la historia francesa.

Construido en 1513 por Katherine Briconnet, luego Diana de Poiters quien le dio mas estilo y por Catalina de Medicis y salvado de la fuerza de la revolución por la Señora Dupin.

Señora Dupin

Diana de Poiters

Catalina de Medicis

Katherine Briconnet

Chenonceau, Francia, 26 de Setiembre de 2012